5 ideas en mi mente (y en mi cuaderno)
El poder de la documentación artística, ir lento para llegar lejos, el lenguaje del inconsciente, arte que repara y la libertad de no ser tu proyecto. Edición #41 de Belleza que salva.
Se va marzo, llegan los días soleados a Madrid y yo, como todas las semanas, me pregunto qué te puede servir, qué te puede inspirar, qué te puede despertar un poquito más el corazón.
Hoy, 5 de las ideas que rondan mi mente (y mi cuaderno) estos días, para que las uses con intención.
Que el eclipse no te eclipse. Que sirva para despedir con amor lo que no va más.
Abrazo muy fuerte,
Bar
Hoy en Belleza que salva:
Documentar: El poder de mirar desde afuera
Energía: Ir lento para llegar lejos
Crear: El lenguaje del inconsciente
Sanar: Arte que repara el mundo
Identidad: La libertad de no ser tu proyecto
1.El poder de mirar desde afuera
Esta semana, en Bluma —el viaje de transformación creativa que empezamos hace tres semanas con un grupo de mujeres creadoras y artistas— les propuse documentar artísticamente sus propias vidas desde afuera, como si estuvieran visitando a unas extrañas y se preguntaran cómo es la vida que llevan, cuáles son sus intereses, de qué se trata ser ellas mismas.
Los resultados fueron sorprendentes, pero sobre todo me recordaron que lo que importa nunca es el ejercicio en sí sino las preguntas y los lugares a los que nos llevan.
Si miraras creativamente tu vida desde afuera esta semana: ¿qué dirías que a tu personaje le importa más?
La documentación de los momentos de belleza (y caos) de nuestras vidas es poderosa, y te puede mostrar mucho más.
Acá dos artistas que me emocionan y que hacen del registro detallado de lo cotidiano su peculiar forma de arte, para que te inspires a hacerlo también.
Hillary Pecis: libros y flores
O cómo documentar nuestras mesas de trabajo con este shock de energía.
Isabel Quintanilla: realismo íntimo
O la poesía visual que puede tener nuestro entorno diario más cercano.
2.Ir lento para llegar lejos
Podés lograr tus sueños creativos más locos, ambiciosos y desenfrenados yendo lento y descansando seguido. O, en realidad, creo que es la única manera, al menos para mí.
Últimamente la vida me recuerda esto de mil formas distintas. Cuanto más rápido y productivamente quiero ir, más me frena el cuerpo y me enseña que los resultados no se logran así.
Yo, la hija del rigor, de la puntualidad, de la productividad y del hacer, aprendí el año pasado a los ponchazos que esa forma de vida no era sustentable. Sí, me puede servir por un mes, o dos, pero pronto descubro que mi creatividad se seca, mi cuerpo se agota y mis ganas de vivir y ser auténtica se apagan en pos del próximo resultado. A mí ya no me funciona así, y mi cuerpo se encarga de recordármelo cuando me olvido.
Por eso ahora me repito: “Si cuido mi energía, ella me cuida a mí”. Si voy lento cuando necesito ir lento y rápido cuando necesito ir rápido, mi energía me premia y las cosas me salen mucho mejor.
Ojalá te sirva como recordatorio cuando creas que solo hay una forma de llegar.
3.El lenguaje del inconsciente no es verbal
Esto lo dice John Cleese en su libro Creativity: A Short and Cheerful Guide.
Por más que me guste mucho escribir y ver los resultados de poner la mano en la página para formar palabras, el inconsciente necesita otras formas menos racionales para ponerse en acción y manifestarse.
Dibujar, pintar, bailar, armar esculturas, hacer collages, crear espirales, cualquier forma de meditación activa y de liberación no estructurada de lo creativo nos conecta con materiales de la mente que estaban esperando ser manifestados pero que por un motivo u otro no podíamos (o sabíamos) liberar.
Cuando lo hacemos, traducimos emociones y sensaciones y las pasamos por nuestro cuerpo para liberarlas. Es otra forma de dejar de rumiar, de hacer espacio en nuestro inconsciente y de distanciarnos de lo que nos pasa para ponerlo en otro lado. Y muchas veces para sanarlo.
4.Arte que repara el mundo
"Necesitamos arte que ordene, arte que remiende, arte que repare", escribe Austin Kleon.
Con el estado en el que está el mundo, a veces me surgen las preguntas: ¿qué sentido tiene dedicar mi vida entera a crear y a acompañar a otras a crear? ¿No hay cosas más importantes, urgentes, necesarias? ¿Estoy desperdiciando el tiempo? Por suerte siempre hay autores, amigues, proyectos e ideas que me recuerdan que no es en vano y que, de hecho, crear es una de las tareas más importantes y sanadoras que hay.
Necesitamos arte que repare, que remiende, que ordene, que sane. Necesitamos artistas conectados con su corazón que pongan belleza en el mundo, que nos recuerden que vale la pena el esfuerzo. Personas cuya sensibilidad nos toque el alma y nos sostenga cuando no tengamos más fuerza. Arte y artistas que nos invoquen la magia de estar vivas, que nos muestren la luz para absorberla también, que nos acompañen a llorar, a patalear, a reír pero sobre todo a construir el mundo nuevo. Uno que no necesite ser reparado.
Mientras tanto, entre otras cosas, la fórmula sigue siendo crear y seguir creando.
5.La libertad de no ser tu proyecto
Lo voy a repetir todas las veces que haga falta: no sos tu proyecto, no sos tu negocio, no sos tu creación. Aprender a disociar tu negocio o proyecto de vos misma es una tarea diaria y muy necesaria.
Si a tu proyecto no le va bien, no significa que a vos no te vaya bien. Si tu proyecto no consigue financiamiento, ventas, sponsors, seguidores, lo que sea, eso NO habla de vos ni de tu esfuerzo. Son pruebas, desafíos, posibilidades de hacerlo mejor cada vez.
Ojo: tampoco sos tu negocio o proyecto cuando le va bien, o muy bien. Esto también es disociar.
No sos tu proyecto, no sos tu negocio, no sos tu marca. Aprender a disociarlo desde temprano te puede ahorrar muchos dolores de cabeza. Creo que es lo más poderoso que aprendí el último tiempo y lo que más tranquilidad le trajo a mi vida.
Además: bien, mal, regular, ¿quién dice lo que está bien?
Para mí, ya no hay más reglas, solo experimentos. Y cuantos más errores, más aprendizajes. ¿No?
Muy hermoso! "Construir un mundo nuevo, uno que no necesite ser reparado", gracias 🤍
Maravilla de recomendaciones y recordatorios MUY necesarios. Descubrí a Isabel Quintanilla en una exposición en el Thyssen (Realismo), es increíble cómo pinta esta mujer y lo que transmite.